Playing the Angel
Si hay algo entre las cosas que caracterizan a las chicas que me gustan (o me han gustado) es que gustan de Depeche Mode. Así, víctima de tales designios, algo de capilaridad, innombrables fiestas en su honor y una polera que me regaló la Fran yo también acabé por gustar de estos ingleses.
Ahora me hice con este disco y está genial. Declarado por esta semana como mi disco de cabecera.
El álbum es buenísimo, vuelve a la delicadeza de principios de los 90 pero ahora barnizada con unos tratamientos que estilisticamente le acercan a Nine Inch Nails ( esas armonías sobrias pero no por eso desabridas ni ligeras). No tiene esas irregularidades extrañas y suena como un compuesto preciso, nada huele a relleno donde cada track ocupa un lugar que le otorga sentido a este disco.
En cuanto a temática, creo que este es el álbum menos sexual de DM (maybe I Want It All), me parece que las metáforas o alusiones son casi inexistentes (o quizás son más crípticas), pero lo cierto es que la tónica va por lo afectivo y el existencialismo casi recogiendo el guante de “Songs of faith and devotion” pero sin el ingrediente grunge.
Seguramente será la excusa perfecta para que los puristas acaben de crucificar a Exciter o a Ultra, sus anteriores placas que cargaban con el peso de ser el lugar rupturista que buscaba expandir las capacidades de la banda.
IMHO La lección fue bien aprendida, el pasear por esos terrenos arrojó como moraleja que es la mesura lo que mejor le sienta a la emotividad y sensualidad de DM.
Ahora me hice con este disco y está genial. Declarado por esta semana como mi disco de cabecera.
El álbum es buenísimo, vuelve a la delicadeza de principios de los 90 pero ahora barnizada con unos tratamientos que estilisticamente le acercan a Nine Inch Nails ( esas armonías sobrias pero no por eso desabridas ni ligeras). No tiene esas irregularidades extrañas y suena como un compuesto preciso, nada huele a relleno donde cada track ocupa un lugar que le otorga sentido a este disco.
En cuanto a temática, creo que este es el álbum menos sexual de DM (maybe I Want It All), me parece que las metáforas o alusiones son casi inexistentes (o quizás son más crípticas), pero lo cierto es que la tónica va por lo afectivo y el existencialismo casi recogiendo el guante de “Songs of faith and devotion” pero sin el ingrediente grunge.
Seguramente será la excusa perfecta para que los puristas acaben de crucificar a Exciter o a Ultra, sus anteriores placas que cargaban con el peso de ser el lugar rupturista que buscaba expandir las capacidades de la banda.
IMHO La lección fue bien aprendida, el pasear por esos terrenos arrojó como moraleja que es la mesura lo que mejor le sienta a la emotividad y sensualidad de DM.
hola. bueno. vuelvo para comentar tu post, que de paso se agradece, y decir que el diseño es en falso cuando se hace de facil digestion. No es que sepa la respuesta a que es el diseño verdadero, pero siempre es mejor comerse una hambuerguesa en casa que en macdonalds... independiente de la experiencia que te hagan sentir en ese cuchitril, valoro el origen que se hace personal cuando comes hambuerguesas en mi casa. no se si me explico: el diseño no deberia ser tan vil como para encerrarse en si mismo, no venderse en ghettos, creo que el espiritu de diseño es social. algo asi.
a proposito! necesitamos diseñadores, participa en ciudad diseño! www.ciudadiseno.cl
Posted by Jp | miércoles, noviembre 02, 2005 4:57:00 p. m.