que flaco estás Diego...
“No hay que darle poder al pueblo”, a veces esa frase parece ser tan sabia.
Es muy fácil tacharlo de dictador y autoritario en el tono aireado con que siempre se alzan tales epítetos, por ello muchas personas optan por no reconocerle crédito alguno a sus logros.
Seamos sinceros, Diego Portales con su estilo cabrón puso fin al periodo anárquico en el que se sucedía un gobierno tras otro con la misma rapidez que una persona que yo conozco cambia de pareja sexual. Y no se detuvo allí, pues se encargó de aorganizar y administrar las bases de la República con métdos que muichas personas hoy discuten.
No tiene sentido alguno juzgar moralmente los actos de Portales desde nuestro prisma postmodernista. Las circunstancias añejas en que se adolecía de una figura fuerte para poner orden a un proceso decididamente caótico están fuera del alcance de algunos miramientos ponzoñosos.
De igual forma, tampoco tiene sentido ser revisionista y aplicar una óptica Portaliana, en la que primaba el sentido de que servir a la nación es la obra máxima del hombre, para juzgar a la pichanga política actual, en la que los jugadores hacen poca o ninguna demostración de sentido de servicio a la nación.
Me gusta el estilo de Portales.
Un cabronazo...
Portales Rules!
Es muy fácil tacharlo de dictador y autoritario en el tono aireado con que siempre se alzan tales epítetos, por ello muchas personas optan por no reconocerle crédito alguno a sus logros.
Seamos sinceros, Diego Portales con su estilo cabrón puso fin al periodo anárquico en el que se sucedía un gobierno tras otro con la misma rapidez que una persona que yo conozco cambia de pareja sexual. Y no se detuvo allí, pues se encargó de aorganizar y administrar las bases de la República con métdos que muichas personas hoy discuten.
No tiene sentido alguno juzgar moralmente los actos de Portales desde nuestro prisma postmodernista. Las circunstancias añejas en que se adolecía de una figura fuerte para poner orden a un proceso decididamente caótico están fuera del alcance de algunos miramientos ponzoñosos.
De igual forma, tampoco tiene sentido ser revisionista y aplicar una óptica Portaliana, en la que primaba el sentido de que servir a la nación es la obra máxima del hombre, para juzgar a la pichanga política actual, en la que los jugadores hacen poca o ninguna demostración de sentido de servicio a la nación.
Me gusta el estilo de Portales.
Un cabronazo...
Portales Rules!